Abrir una franquicia: cómo montar tu propio negocio convirtiéndote en franquiciador o franquiciado

Crear tu propia empresa es una de las opciones profesionales más importantes -y al mismo tiempo más arriesgadas- que existen. Abrir una franquicia es la solución ideal para iniciar un negocio de éxito. Los riesgos minimizados y una marca establecida en el mercado son las características ganadoras de los negocios en franquicia.
Para poner en marcha un nuevo negocio, no basta con tener una gran idea y capital para invertir. De hecho, es necesario llevar a cabo algunas actividades indispensables, como la elaboración de un plan de negocio, la realización de análisis de mercado y la planificación de estrategias de lanzamiento, marketing y ventas. Muchas veces ni siquiera el desarrollo de todas estas actividades puede garantizar el éxito de una idea de negocio. Los riesgos de la actividad empresarial son muchos y demasiado elevados. Sólo hay una forma de minimizar estos peligros y de iniciar su propio negocio de forma sencilla: abrir una franquicia.

Para abrir su propio negocio desde cero, tendrá que diseñar usted mismo todos los aspectos del plan de puesta en marcha, asumiendo todos los riesgos que ello conlleva. En cambio, si se confía en un negocio de franquicia, se podrá trabajar de forma autónoma, aprovechando una marca ya establecida y minimizando los riesgos del negocio.

La franquicia es actualmente uno de los sectores que mejor contrarresta la crisis económica y la competencia de los grandes actores digitales. Los sectores de franquicia más rentables son la alimentación, el bienestar y la ropa.

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