Algunos tipos de champú son:
Champú neutro: este tipo de champú es bueno para cabellos normales y equilibrados que no necesitan ser tratados por un problema especÃfico.
Champú hidratante: ayuda al cabello seco a retener la humedad, haciéndolo más flexible y suave al tacto. Se recomienda para cabellos rizados o encrespados, finos y con tendencia a la sequedad.
Champús para cabellos teñidos: tienen como objetivo mantener el color del tinte en el cabello durante más tiempo, respetando la pigmentación. Es un tipo muy especÃfico para cuando tenemos el pelo teñido.
Champú voluminizador: aporta volumen al cabello fino, seco y sin brillo.
Champú anticaspa: el champú por excelencia para las personas con cuero cabelludo graso y exceso de sebo. En el caso de este problema, deben utilizarse como tratamiento muy especÃfico y deben tratarse con suavidad. En estos casos, lo mejor es consultar a un dermatólogo lo antes posible.
Acondicionadores: sirven para complementar el champú y tienen caracterÃsticas más suaves y emolientes. Los tipos de acondicionadores son los mismos que los indicados para el champú y lo complementan.
Mascarillas: son productos de peluquerÃa para tratar el cabello seco que necesita retener la humedad. Estos productos también contienen vitaminas, proteÃnas de seda, lino, avena, etc.
También tenemos diferentes tipos de fijadores para utilizar en función de nuestro objetivo
Geles fijadores: se utilizan para mantener la cohesión entre las hebras del cabello. Dan un brillo húmedo y no son pegajosos al tacto.
Espumas: tienen un efecto muy similar a los geles, formando una funda muy fina, transparente, suave y flexible alrededor del cabello.
Lacas: se utilizan para fijar y dar forma al peinado. Cuando la apliques, asegúrate de que es adecuada para tu tipo de cabello y el peinado que quieres conseguir.
Tinte y coloración: artÃculos de peluquerÃa que puedes encontrar en una amplia gama de colores y tonos para elegir.
Accesorios de peluquerÃa online, secadores, secadores y planchas de pelo: las herramientas térmicas deben usarse con moderación y si tienes el pelo seco o delicado, debes utilizarlas lo menos posible.
Protectores térmicos: deben utilizarse antes del secado. Crean una pelÃcula protectora alrededor del cabello que lo protege del calor y de las agresiones externas.